Herejía de Horus 49: Wolfsbane - Reseña (review)

Muy buenas a todos, lectores ocasionales y habituales de este, el blog de la profanación, el Warhammer en castellano, las reseñas y decenas cosas más. Hoy traemos una reseñita de un audiolibro que me he ido escuchando estas semanas: Wolfsbane, la Maldición del Lobo, donde Leman Russ se enfrenta a Horus... ¡chan chan chan chaaaan!

Contexto

La Herejía de Horus ha avanzado y GW le ha sacado mucha chicha: todas las legiones tienen sus novelas, los Ultramarines han hecho su propio imperio y todo, pero ahora ya no; Fulgrim y Angron son demonios ya, miles de Astartes han muerto: Istvaaan III y V, Paramar, Phall, Calth, etc. Esta serie ha llegado muy lejos, hasta hemos visto ya al Emperador hacer sus cosas bajo el palacio imperial... pero la hora del fin se acerca. Y Leman Russ va a dar caña a cierto calvo malvadoso.

Trama

-- Cuidado, SPOILER --

La historia comienza presentándonos el momento en el que Horus conoce a Russ, llamándolo bárbaro y mostrando cierto desagrado. Es para emular los celos que tiene un hijo único al dejar de serlo, una leve muestra de recelo que Russ majamente intenta quitar con su bonachonería pero que Horus rechaza. Russ le reta a una pelea para ver quien es el mejor, pero de buen rollo, a lo que Horus se niega, ya que le dice a Leman Russ que no podría ganarle.

El tiempo pasa, estamos en Terra, Dorn ha estado realizando las modificaciones del palacio del Emperador y se está discutiendo la defensa de Terra. Sanguinius llega a Terra y se junta con sus hermanos: Leman Russ, el Khan y Dorn. Repasan los eventos pasados y los que piensan que serán futuros, echan en cara a Russ que la matanza de Prospero es porque Horus envenenó sus ideales y azotó su ira.

Dorn le llama hipócrita por haberles rechazado por hechiceros cuando el propio Russ confía en los de su mundo. Este dice que la diferencia radica en que los de los Lobos saben donde están los límites (recordemos que para GW, los Lobos Espacicales, da igual lo que hagan, siempre son mejores).

Leman Russ dice que se va a por Horus, es el ejecutor del Emperador y no va a quedarse de brazos cruzados. Se siente culpable por lo de Magnus y cree que así expiará aquello, además de poder quizás acabar con Horus. A lo largo de todo el libro se le dice que no puede. Garviel Loken se lo recuerda de nuevo, le dice que Horus es demoníaco y que no puede matarle. Y se le recuerda a Leman Russ que tiene que usar la Lanza del Emperador.

Antes de ir a por Horus, que los Caballeros Errantes lograron marcar el Espíritu Vengativo para saber por donde está con sistemas especiales, decide ir a Fenris a una cosa de supersticiones de los Lobos que le ayudará a ver la verdad. Russ en Fenris se mete en la Disformidad y le pasan las hazañas de Thor pero transformadas en Warhammer. La bestia es Morkai, la vieja es la guerrera eterna, etc.

Entonces gana y pregunta, no como vencer a Horus, ya que eso es imposible (la novela lo repite mucho) sino como puede ayudarle la Lanza del Emperador a ganar a Horus... La Lanza tiene un nombre antiguo, es la Lanza que jamás falla, la Maldición del Lobo, ya que cuando se arroja nunca erra en su ataque, creada por el propio Emperador. La figura fantasma del propio Russ habla con él, le explica esto y le propina un lanzazo en uno de los corazones, y le provoca un trauma, ya que le enseña la verdad, la verdad de lo que son los primarcas... Y le dice que si logra herir a Horus con ella conseguirá algo espectacular: recordarle a Horus quién es, un Primarca hijo del Emperador y no una marioneta de los Dioses del Caos...

Los Lobos Espaciales reunen su legión al completo, dañada por lo de Prospero y van a saco a por Horus, se teleportan en el sistema estelar donde está su nave y, acercándose desde lejos para que no les detecten lanzan un ataque directo contra el Espíritu Vengativo y la flota de Horus, pillándole relativamente por sorpresa. La nave de Horus está llena de cosas demoníacas y chungas, pero los Lobos se lían a romperle el armamento a la nave y en su asalto dejar una ruta de escape por si acaso, aunque la misión es mayormente suicida.

Horus aparece con su aura roja malvada alrededor de su cabeza como si de la virgen maría, pero en calva, embutida en armadura y en hombre se tratara.  Este intenta tentar a Russ para que se una a él, aunque sin esforzarse en demasía. Russ y Horus se lanzan a la carga y se lleva a cabo una lucha épica y demencial. Horus le acaba clavando la garra a Russ, pero este le ensarta un lateral con la Lanza del Emperador. Horus pierde su aura malvada y de golpe es como que envejece 100 años, y se arrepiente de ser un celoso de Leman Russ. De verdad sigue pensando que el Emperador es el mayor mal de la Humanidad y que él puede salvarlos a todos pero... con tanta muerte, ¿es él mejor que el Emperador? No, ya es demasiado tarde para salvarle le dice a su hermano Leman Russ. De golpe el poder del Caos le insufla: "No hay poder más grande que el del Caos, este universo arderá igual que otros tantos ya lo han hecho." Después clava la garra en Leman Russ y le tira muy malherido al otro lado de la zona de combate. Horus se alza sobre un medio-muerto Russ diciéndole lo insensato que ha sido pero este sigue desafiante: "¡Podrás matarme, pero jamás ganarás!"

Entonces los Lobos Espaciales se lanzan en masa para salvar a su Rey Lobo. Luchando inutilmente contra Horus que los va machacando como a moscas, pero que le evitan acabar la macabra tarea. Entonces Leman Russ aprovecha para retirarse ayudado por Bjorn Garra Implacable perseguido por los Marines, ya convertidos en Marines del Caos.

Apenas unos pocos Lobos Espaciales logran escapar con las huestes de los traidores a sus espaldas. Horus se sienta en su sanctum mientras los servidores atienden su herida. Una parte de Horus duda, y ve su personalidad levemente desdoblada... Horus Lupercal, elegido del Emperador y Horus, el Señor de la Guerra... un leve atisbo de duda... La imagen de Abaddon aparece en el monitor holográfico. Horus le ordena perseguir a los Lobos Espaciales y destruirlos, y que después se reuna con él para iniciar el ataque final, el asalto a Terra.

Opinión

Un libro cojonudo, sobre todo si eres fan de Leman Russ, ya que básicamente es un libro sobre él con muchos plagios de mitología del dios Thor, que puede verse en este vídeo:

La lectura es amena, la historias de guerra son muy rápidas, directas y sin demasiada paja en las escenas de combates. Se describe muy bien la decadencia de los traidores y el afan de los leales por mantener Terra a salvo. Se mezclan historias de Belisarius Cawl (sí, nos lo han colado aquí con calzador). No voy a mencionar nada de este personaje, si alguien quiere saber más, toca comprarse el libro.

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